El mundo actual se enfrenta a desafíos sin precedentes. Desde una pandemia global hasta la agitación económica y las guerras actuales que han retrocedido al mundo 80 años o siglos atrás de la estabilidad y relativa paz que disfrutábamos, estamos bombardeados por factores estresantes desde todos los lados. En medio de este caos, puede ser difícil encontrar nuestro equilibrio y mantener la compostura.
El estoicismo, una antigua filosofía que enfatiza la resiliencia y la virtud, ofrece valiosos conocimientos sobre cómo navegar estos tiempos desafiantes. Los estoicos creían que no podemos controlar los eventos externos, pero sí podemos controlar nuestros propios pensamientos, acciones y actitudes. Al enfocarnos en lo que podemos controlar, podemos reducir la ansiedad y construir resiliencia.
Aquí hay 10 principios estoicos que pueden ayudarnos a navegar los actuales tiempos difíciles:
- Principio Fundamental: No puedes cambiar los eventos de la naturaleza, pero puedes controlar cómo reaccionas ante ellos.
- La virtud es el único bien (Séneca). Los estoicos creían que la verdadera felicidad proviene de vivir una vida virtuosa, guiada por la razón y la naturaleza. En tiempos de incertidumbre, puede ser útil enfocarse en nuestros valores morales y decisiones éticas. Esto puede brindarnos un sentido de propósito y fuerza interior.
- Los eventos externos son indiferentes (Séneca). Los eventos externos, como la riqueza, la fama y la salud, no son buenos ni malos en sí mismos. Es nuestra percepción de ellos lo que les da valor. Este principio puede ayudarnos a dejar de lado las emociones negativas causadas por factores externos que están fuera de nuestro control.
- Memento mori – Recuerda tu muerte (Séneca). Recordar nuestra mortalidad es un poderoso recordatorio de enfocarnos en lo que es verdaderamente importante en la vida. Frente a desafíos, puede ser útil recordar que nuestro tiempo en esta Tierra es limitado. Esto puede motivarnos a vivir cada día al máximo y apreciar las cosas simples de la vida.
- Dicotomía de control (Epicteto). Los estoicos hicieron una distinción entre lo que podemos controlar y lo que no. Podemos controlar nuestros pensamientos, acciones y actitudes, pero no podemos controlar los eventos externos. Al centrarnos en lo que podemos controlar, podemos reducir la ansiedad y el estrés.
- Vive en el momento presente (Epicteto). Lo único que es real es el momento presente. Preocuparse por el pasado o el futuro solo nos causa angustia. Al centrarnos en el momento presente, podemos experimentar más paz y contentamiento.
- Acepta lo que no puede ser cambiado (Epicteto). Es importante aceptar lo que no podemos cambiar. Esto no significa rendirse, sino más bien aceptar la realidad y enfocarnos en lo que podemos influir. Cuando aceptamos lo inmutable, podemos reducir nuestro sufrimiento y dirigir nuestra energía hacia actividades más productivas.
- Amor fati – Ama tu destino (Marco Aurelio). Deberíamos abrazar nuestro destino, incluso las partes difíciles. Esto no significa que debamos disfrutar del sufrimiento, sino más bien que deberíamos ver los desafíos como oportunidades de crecimiento y desarrollo. Cuando aceptamos nuestro destino con amor fati, podemos encontrar fuerza y resiliencia frente a la adversidad.
- Sé amable con los demás (Marco Aurelio). Debemos tratar a los demás con amabilidad y compasión, incluso a aquellos que nos han hecho mal. Esto se debe a que todos somos seres humanos y todos merecemos ser tratados con respeto. La amabilidad y la compasión pueden contribuir a crear un mundo más positivo y solidario, especialmente en tiempos difíciles.
- Vive una vida sencilla (Marco Aurelio). Una vida sencilla es una vida virtuosa. Abogaban por reducir nuestras posesiones materiales y enfocarnos en lo que es verdaderamente importante. Una vida sencilla puede ayudarnos a estar más contentos y menos estresados, especialmente en tiempos de incertidumbre económica.
Estos son solo algunos de los muchos principios estoicos que pueden ser útiles para navegar los actuales tiempos difíciles. Al incorporar estos principios en nuestras vidas, podemos construir resiliencia, encontrar paz interior y vivir una vida más plena.
Aquí tienes algunos ejemplos específicos de cómo aplicar los principios estoicos en tu vida diaria:
- Cuando te enfrentes a un desafío, pregúntate: “¿Qué puedo controlar en esta situación?” Enfoca tu energía en las cosas que puedes controlar y déjales ir aquello que no puedes.
- Cuando te sientas ansioso o estresado, toma algunas respiraciones profundas y recuérdate que el momento presente es lo único que es real. Concéntrate en las cosas por las que estás agradecido en el presente y déjales ir las preocupaciones sobre el pasado o el futuro.
- Cuando te encuentres con una persona difícil, intenta ser comprensivo y compasivo. Recuerda que todos están pasando por sus propios desafíos. Trata a los demás con la amabilidad y el respeto que desearías para ti mismo.
- Cuando sientas la tentación de excederte en posesiones materiales, recuérdate que la verdadera felicidad proviene de dentro, no de cosas externas. Vive una vida sencilla y enfócate en lo que es verdaderamente importante para ti.
El estoicismo no es una bala mágica. Requiere práctica y disciplina para dominar los principios estoicos. Sin embargo, incluso una pequeña cantidad de práctica estoica puede marcar una gran diferencia en tu vida.
Como siempre, espero sinceramente que mis palabras te ayuden. Cuando elijo un tema y mi contenido, siempre busco ayudar a mis lectores a encontrar caminos, soluciones, alternativas o nuevas formas de enfrentar las dificultades que ciertamente siempre están llegando a visitar a todos de forma aleatoria.
Alfonso Sanchez B.
CEO Axion Virtus